Wednesday, April 13, 2005

Palabras delicadas

a ojos con forma de hojas
Para que ocupar palabras delicadas
Bueno, que, no dices nada; otra vez.
Vienes por un par de dias, pasamos tiempo juntos, a solas, acompañados, reimos.
Y entonces me doy cuenta de que te estoy explicando el mundo, te estoy dando la respuesta de preguntas incontestables, te platico lo que oí en mi oreja justo antes de que dejara el vientre, y te pregunto que piensas, y tu: -nada-. Entonces deberiamos seguir así, como normales, yo fingir que nada he dicho y que no me has escuchado, hasta fingir que nunca estuviste.
el problema, es que sigues estando. entre la lejana idea de tiempo y la absurda insinuacion que representa el espacio.
como si importara que estés lejos: sabiendo que es mi tiempo y sonreir.